Los de PhotoEspaña nos han llevado a Cuenca, pero a diferencia del año pasado las exposiciones, salvo Català-Roca y no es de lo mejor suyo, no están a la altura de un festival de la Fotografía que se pretende internacional, este año han inaugurado incluso en Lisboa, porque lo inundan con vídeo creaciones o colecciones que necesitan texto para explicarse porque si no no sabes qué expresan, es decir lo contrario de lo que debe ser una foto que tienen que contener su propia justificación ética o estética en el recuadro. Por eso me ha gustado más el paseíto que la merendola grasienta y su justificación: yo no soy un canapero, aunque me gustan los libros de fotos y ni siquiera eso han facilitado allí (sólo para las autoridades, decían , como si la información la hicieran ellos: cutres en este caso los conquenses). Miren pues los alrededores y ya veremos si podemos hablar de lo otro.